La guerra en Ucrania es un conflicto con un alto componente de género. La violencia de género ha aumentado significativamente tras la invasión a gran escala por parte de Rusia (incluida la violación como arma de guerra, el aumento de la violencia doméstica, la tortura hacia las mujeres y el riesgo de la tortura de parte de sus hijos y familiares). Millones de mujeres se han visto desplazadas (interna y externamente) y expuestas a la sobreexplotación y a todo tipo de violencia. Estas mujeres se enfrentan a dificultades reales para acceder al trabajo asalariado, a la vivienda, así como a servicios de aborto y salud reproductiva en Ucrania y en los países vecinos donde han buscado refugio, especialmente Polonia.
Al mismo tiempo, las mujeres ucranianas realizan la mayor parte del trabajo reproductivo necesario para la resistencia. Las mujeres participan muy activamente en la resistencia, algunas son combatientes, muchas se han convertido en las principales proveedoras de sus familias. Las mujeres son desproporcionadamente responsables del trabajo de reproducción social, que se ha visto cada vez más amenazado por la destrucción rusa, así como por su privatización en un contexto de militarización y por los presupuestos de austeridad impuestos por las instituciones financieras internacionales. Sin embargo, este trabajo de reproducción social es tan esencial para la resistencia ucraniana como el trabajo de defensa, mucho más reconocido y asalariado.
¿Quién cuida de las cuidadoras?
En este contexto, las activistas feministas se han unido a la resistencia al tiempo que abordan los problemas específicos de género a los que se enfrentan las mujeres. Se centran en las necesidades específicas de las mujeres en el contexto de la guerra a menudo pasadas por alto e invisibilizadas-, como la atención médica y psicológica, los productos de higiene menstrual, la leche para bebé, etc. Estas activistas cuidan de las mujeres que cuidan de toda la población y hacen posible cualquier resistencia. Sin embargo, los recientes ataques totales rusos contra las infraestructuras del país y los consiguientes cortes de electricidad hacen a menudo imposible el trabajo de estas activistas feministas. Así pues, ¡unámonos para (em)potenciar a nuestras hermanas ucranianas!
El Colectivo Feminista de la Red Europea de Solidaridad con Ucrania está recaudando fondos para apoyar el trabajo humanitario y activista que llevan a cabo cuatro colectivos feministas. Los fondos recaudados se repartirán íntegramente entre Taller Feminista, Albergue Feminista, FemSolution y Bilkis.
Puedes apoyar a estos colectivos haciendo un donativo en la siguiente cuenta, con la mención "Powering Ukrainian feminists":
ENSU/RESU account in Euros. Payment to Adam Novak, LT43 3250 0840 1423 8658, BIC REVOLT21
On PayPal via
https://paypal.me/DrAdamNovak?country.x=SK&locale.x=sk_SK
On Revolut via @adamlg35v
ENSU recauda fondos para estos cuatro grupos
Taller Feminista opera en Lviv y la región circundante, trabajando con refugiados y mujeres mayores. Desde el comienzo de la guerra, Taller Feminista ha ampliado el abanico de sus actividades, incluyendo el cuidado de niños y la ayuda para encontrar alojamiento a mujeres desplazadas , la atención a ancianos y el apoyo psicológico y otras cuestiones humanitarias. Contacto: [email protected]
Feminist Lodge es una iniciativa de base, fundada en Kiev en 2017 con el fin de promover la igualdad de género a través de actividades educativas y culturales. La guerra ha obligado a sus miembros a orientar sus esfuerzos hacia la atención humanitaria de mujeres vulnerables y sus familias, les envían al campo, incluídos los territorios temporalmente ocupados. También se ocupan de las personas desplazadas internamente. Contacto: [email protected].
FemSolution es una iniciativa feminista horizontal de izquierda de base ucraniana, fundada por estudiantes en 2016. Desde la invasión rusa en Ucrania, este grupo se centra en la distribución de productos de higiene menstrual para las personas afectadas por la guerra y de suministros médicos para personas con problemas de salud mental. Ambas necesidades están fuertemente ligadas al género, ya que las mujeres y las niñas se ven desproporcionadamente afectadas por los conflictos armados. Contacto: [email protected]
Bilkis es una iniciativa feminista independiente, interseccional e integradora con sede en Kharkiv. Sus actividades incluyen la recaudación de fondos para alimentos y comestibles básicos, el transporte de alimentos y ayuda humanitaria desde Polonia/Varsovia, el transporte de mujeres y madre hasta sus familias, la asistencia en la búsqueda de vivienda y refugio, y la prestación de ayuda humanitaria a quienes no pueden irse.